martes, 18 de febrero de 2014

No hay como regresar a la tierra

No, no voy a ir a acampar nunca más.
Nada vale el piso duro, el frío, el pasto y los insectos, la mala comida.

Lo que si vale, es colocar en la balanza palabras contra acciones. Lo que ha sucedido contra lo que se ha platicado no siempre hace match.

Y no importa, ya he estado ahí, alma antigua reciclada, sé lo que estás haciendo y cómo quieres lograrlo, lástima que te topaste con quien va un paso más adelante, y qué bueno que intentes chamaquearme a mi, de paso, de menos, me entretienes.

Besos a quienes hacen lo que dicen que hacen.
Nada para el resto.

No hay comentarios:

Del santo Evangelio según san Mateo 8, 23-27

 Hoy vemos a unos discípulos llenos de miedo por una tormenta que les tocó en la lancha. Podríamos decir que era un tormentón . Y aquí te p...