La semana pasada fui a desayunoalmorzar con AC, una amiga que me encontré sin querer y sin hacer, en medio de una jungla de machos donde faltaba poco para que nos trataran como esclavas. Cada que la veo nos celebro no solo la amistad, sino la paciencia, el no asesinato (aún cuando tuvimos oportunidades, muahaha...), y sobre todo, la liberación de semejante ambiente.
Cuento a muchas ya a las mujeres que por alguna razón, siendo chicas nos hicieron grandes, "si la burra no era arisca" diría mi abuelita, y esque sigo sin entender, cómo sucede, en un país donde reinan los matriarcados, que sigan viviendo pocohombres como los que todos conocemos.
Otra amiga, M, quien se fue a vivir a Houston con su hija, me pregunta cómo explicarle a su hija "cómo ser mujer", por un momento me enojé, me pregunté cómo diatres una mujer que con los huevos del mundo le fue a decir a la mamá de su novio que iba a ser abuela aún cuando el hijo-novio- en cuestión fuera tan deshuevado como para no ser papá, que con pantalonzasos se mudó a otro país donde ella y su hija fueran tratadas con respeto en vez de quedarse en su pueblo donde ella sería "la puta del pueblo" por ser madre soltera y su hija, pues "la hija de la puta", cómo una mujer así no se da cuenta del mujerón que ya es, y que su hija no debe sino verla para saber "cómo es que se es mujer".
Así, que haciendo un recuento de "mis viejas" decidí, igual que mi Club Postal, integraré el Club Pro Viejas, donde todas nos echemos una mano, donde todas nos respetemos y cuidemos (y ésto si esta cañón, porque no solo "te respeto" es un "te dejo ser", sino que además respeto a tus hijos, respeto a tu marido, respeto tu trabajo, respeto tu decisión, etc).
Hoy, besos solo a las viejas, que los hombres se besuqueen entre ellos.
2 comentarios:
Amén! Amén! Amén!
Poder a quien lo merece, a quien se lo gana y a quien sabe portarlo.
que buen post!!! por las mujeres nos echamos caca unas a las otras y eso no nos ayuda para nada...
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