miércoles, 13 de noviembre de 2024

Del santo Evangelio según san Lucas 17, 11-19

 Hoy, comunidad, el Evangelio tiene dos palabras fundamentales, y ni son palabras domingueras: si tienes tu misal a la mano subráyalas o si no, apúntalas por ahí en un post it o en un papelito y lo pegas en el refri.

 Las palabras son:           SANADO           y         SALVADO.

 Se parecen mucho, casi suenan igual, pero hoy hay 9 personas de diferencia entre una y otra.

 Fíjense que allá en antaño, cuando yo era chica, los grandes nos enseñaron que había unas palabras mágicas, que nos ayudaban en todo, alguien se acuerda de esas palabras mágicas??

(Abrimos micrófonos a ver si alguien las recuerda)

                                         POR FAVOR      Y      GRACIAS

 Yo creo que también deberíamos incluir PERDON, pero esa es historia para otro día.

 Esas palabras mágicas: Por favor y Gracias, tienen mucho que ver con la actitud con la que pides las cosas, y con la que las recibes.

 Hoy día, yo creo que por la cantidad de personas, por la rapidez en que queremos hacer las cosas, por la competencia que nos traemos entre todos, ya no es común que pidamos POR FAVOR, ni que demos las gracias. Lo que es común es que nos quejemos de todo, lo que es común hoy en día es que corrijamos a todos, lo que es común es que critiquemos y juzguemos muy rápido cada cosa que hacen los demás, y también lo que hacemos nosotros mismos.

 En el Evangelio de hoy, Jesús hizo lo que siempre hace: se detiene a ESCUCHAR, luego da una instrucción, y de paso, libera de lo que le aqueja a quienes le llamaron. Solo uno del grupito que lo llamó, del grupito que hizo caso, del grupito que fue SANADO, solo uno, solo uno regresó a agradecer.

 Y cómo vamos con eso?

Qué actitud predomina en tu día? Te levantas y aaaay no, hoy esta nublado, pero qué día tan feo! Y se me olvida agradecer que hoy desperté! Aaaay no mira qué trafico tan horroroso! Y se me olvida agradecer que tengo coche, y que le puedo poner gasolina, y que me puedo mover en mi coche. Aaaaaay no… qué internet tan lento! Y se me olvida que hasta hace unos años el internet no existía siquiera, que Dios le dio sabiduría a algunos científicos que lo inventaron y que hoy nos podemos reunir de forma virtual para celebrar la Liturgia. Y como esos, hay tantos “aaaaay no” que decimos por todo…

 Convertir la queja en agradecimiento es una tarea muy complicada, casi imposible. Implica un cambio de hábitos inculcados desde la gestación a veces. Nos significa un esfuerzo de pensar, de aprender, de desaprender un montón de cosas, de situaciones, de costumbres. Es tan difícil ese cambio, que hoy el ejemplo es claro: Solo 1 de cada 10 lo logra.

Yo quisiera, que al menos los que estamos por acá, con mucho esfuerzo, no lo voy a negar, logremos ser el leproso que regresa a dar las gracias, porque ese, y solo ese leproso, fue, no solo sanado, también fue salvado, y yo quiero que tú seas salvado también.

 Pidamos POR FAVOR a Dios que nos ayude con ese cambio que necesitamos todos, y AGRADEZCAMOS cuando lo logremos.

Hoy que es el 5to aniversario de PC, quiero pensar (seguramente con mucha soberbia) que nuestra comunidad ha sido el 1 de los 10 leprosos, que hemos sido muy criticados por cambiar, por pensar diferente, por actuar diferente, por sentir diferente, que somos ejemplo del cambio.

Seamos infinitamente agradecidos por nuestras diferencias, por dar los primeros pasos, por ser perseguidos y acosados, por ser criticados, GRACIAS SEÑOR por ponernos aquí como comunidad cada día más unida.






Besos al leproso que regresó.

Nada para el resto.

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