lunes, 11 de febrero de 2013

Me quito o me pongo?

En serio que yo aprendí la lección hace muuuchos años.
Por decir una mentira (que por cierto ya no recuerdo) perdí lo que en ese momento de mi vida era lo que más quería, no solo su compañía, sino todo lo que eso representaba. Y se me fue con justa razón.
Luego de eso sobrevaloro la verdad, así, la verdad cruda, completa, directa, en tiempo y forma. Y procuro llevar así mi vida, comprendiendo además que la verdad es subjetiva y que cada persona ve las cosas de forma diferente. Sin embargo toda mentira es solo eso, una mentira, cruel, vil, meditada (aún cuando la estemos inventando en ese momento siempre piensas cuál es la mejor mentira y así la sueltas, meditada). Y con esa misma medida educo a mi descendencia, con la verdad sobrevalorada y la mentira se castiga más rudo que cualquier otro acto.

Luego entonces, al ver que una vida que yo pensaba linda y complicada esta más untada y marinada de mentiras tras mentiras qué se hace? Te quitas para no ser embarrada de mierditas? O te pones cerca para ayudar a lavar con cloro y detergente cada mancha que vaya saliendo?

Honestamente me puse furiosa, como energúmeno, como toro picado... al darme cuenta que quien me juzgó por la paja de mi ojo, no se da cuenta de la viga del suyo. Y por supuesto que mamáescudo salió de inmediato (y esa no se va hasta que el cloro enjuague la mierdita más chiquitilla). Pero y mientras? Y al final del día cuando ya sabemos que la nueva laura también se va a ir a casa con la manos vacías? Le respondemos? O mejor nos quitamos para que enjuaguen sus cochineros y si nos conocimos ni me acuerdo?

Creo que esperaré a que me pregunten lo que quieran saber, prometiendo la verdad cruda, completa y directa; prometiendo que la confianza que alguna vez existió ya murió y hasta tuvo velorio éste finde, y por tanto no enviaré ni medio archivo de nada NUNCA más, ni pensar de las fotos. Pero volver a buscarlo? Jajajajajaaaajajaj  aayyy ajajajajajaja ¬¬ con quién crees que estás tratando menso?!?!?!?

Besos a quienes tienen los huevos para cumplir las promesas que hicieron en el altar.
Los demás se embarran porquerías solitos, así que no necesitan mis deseos.



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Del santo Evangelio según san Juan 6, 30-35

  RESPIRA   Seguimos de pascuas!! Oigan, éste Evangelio parece como que muy sencillo no? Siempre digo eso y nunca resulta tan sencillo...