Para viajar

Ya me contaba un ex-compañero, cuando salía de su casa y caminaba una hora hacia su trabajo, cruzaba la frontera de un pueblo a otro y solo podía ir caminando. Cuando quiso hacer lo mismo en ésta ciudad adorada por los dioses aztecas por poco le tienen que amputar las paturrias!! El tramo que él pensó podía hacer en una hora a pié le tomó más de 5 y además no llegó, pobre, pero algunos solo así entienden...
Yo quise pensar en él todo el camino desde potrero hasta perisur, pareciera que caminé porque me duelen las piernas y las pompas, pero hice solo una hora con 15 minutos, y cada vez que repito el tramo es el mismo tiempo, que deportista ando no??

Pues no!! La verdad es que viajé ya varias veces en el metroBus de la Ciudad de México, cosa que ya solo con decirla es una pesadilla, lleno de gente, lleno de rutas raras, lleno de olores matutinos y vespertinos, lleno de caras, de libros, de maquillajes en proceso, de sueños y ronquidos. Creo que hasta que los vi me di cuenta de cuánto extrañaba ver a la gente, no hablarles ni tenerlos taaaaaan cerca, pero si de verles.

Esperando que tenga que hacer ese trayecto diario, y sintiendo un extráñote por mi coche, me despido ésta noche falta de lluvia... a ésa si la extraño...

Besos a todos los que escriben con acentos (ortográficamente correctos), nada para el resto.