Fíjense que cuando escuchamos una advertencia así
tan directa como la que nos dice hoy el evangelio, lo primero que pensamos es
“uy!! Me tengo que cuidar. Hay muchas personas terribles que me van a engañar,
que me van a ver la cara, cómo le voy a hacer para identificar a los malos?!”
Me gusta mucho una historia, seguro que ya la he
contado, de una persona que va super enojada con su párroco, a decirle oooigame
Señor cura!!! Yo ya me voy de ésta parroquia, de ésta iglesia, ya estoy
pensando en hacerme budista o musulmán o a ver qué, porque aquí (y conste que
yo no he estado en todas las parroquias eh!) porque aquí solo hay chismes en
los grupos, los coordinadores se la pasan en competencias a ver cuál es más
chipocludo, ya me inventaron un chisme que esta dañando mi reputación, hasta mi
matrimonio se está tambaleando por esto!! Ya me voy!!
Y el Sacerdote le dijo, ok, yo no te voy a detener,
tu eres libre de ir a donde quieras y encontrar tu fe en donde tu decidas, solo
te voy a pedir una última cosa antes de que te vayas: Y saca un vaso de vidrio,
lo llena de agua hasta el borde borde, y se lo da a ésta persona en sus manos.
Y le dice, ve a dar una vuelta a la manzana, y regresas aquí SIN que se derrame
una sola gota de agua, no importa cuánto tardes, aquí justamente aquí te espero
para una última pregunta.
Entonces ésta persona empezó a caminar despacio, con
la mirada fija en el vaso, pasito chico pasito chico, hasta que regresó con el
Sr. Cura.
El sacerdote entonces le preguntó: Viste a la vecina
del zaguán blanco que no podía meter su coche? Viste al niño que se cayó de la bicicleta?
Te diste cuanta de cuántas veces pasó junto a ti el gatito que vive en la casa
de la esquina de la calle de atrás? No Sr. Cura, yo iba vendo el vaso
solamente. Así debes venir aquí, vigilando TU fe, poniendo atención en lo que TÚ
haces.
Qué tanto vamos vigilando nuestro propio vaso, qué
tanto voy viendo si YO me voy portando bien con todos, porque si voy sintiendo
que todos me van haciendo cosas a mí y yo pobrecita de mi tan santa virgen y
mártir que soy, tal vez me estoy engañando.
Besos a los lobos conscientes y con intención de mejorar.
Nada para el resto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario