Llevamos, honestamente, ventaja.
Mis hermanos y yo somos hijos de docente. Eso nos obligó siempre a saber separar las cosas y mantener el respeto a cada actividad de nuestra mamá.
Lo cierto es que no todos son hijos de una mujer trabajadora, y mucho menos de una respetuosa de los demás, y bajo ese esquema es mi momento y oportunidad de volver a crecer, teniendo paciencia con aquellos que no entienden éstos procesos de la separación de responsabilidades.
Besos a mi madre.
Nada para el resto.
lunes, 29 de diciembre de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Del Santo Evangelio según San Juan 12, 44-50
Seguimos de pascuas!! Hace un par de días, una gran amiga nos preguntaba, ¿logramos recordar cuál fue nuestro primer miedo? Toma un segu...
-
Saben hace cuánto no me preguntaban un "Cómo estas?" con semejante sinceridad?? Años! "El rimo vertiginoso de nuestros días...
-
La por muchos conocida pero mal nominada "pero si yo calzo del 2". Hay muchas razones por la que el cuerpo una vez llegada la ed...
-
Hace años que no dejo nada acá... éste quizá es el último. La vida me deja exhausta. Dos empleos, a veces 3, Princess y Gordito que siguen ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario