Yo no puedo quejarme, en realidad siempre he tenido unas suegras de concurso, la mamá de JC, por ejemplo, que incluso nos procuraba una relación cuando no la teníamos su hijo y yo, ella me sigue llamando nuera y yo la sigo llamando suegra... o la mamá de AG, quien tampoco fue nunca mi suegra, pero que sigo llamando mamá y desafortunadamente me sigue comparando con la que si es su nuera :S... la mamá de Ferguson, adorada Arqui, que me contaba en todas las navidades y le pedía permiso a mi mamá para llevarme de vacaciones con la familia y que en cada reunión me volvía a presentar con toda la familia... la mamá de FR, que se hizo amiguísima de mi abuelita y se iban al Tai Chi en las mañanas... o la mamá de R, que me sigue escribiendo cartas en papel perfumado contándome lo que hacen sus nietos... la verdad es que no me ha ido tan mal, claro, no falta el negrito en el arroz, y hoy hasta preferimos sacarnos la vuelta cuando nos vemos (ella se lo pierde y yo me lo ahorro).
Espero en verdad no ser una suegra latosa y pasar triunfante por ese puesto, de La Princesa hay ya varios pretendientes significativos, de Bola veremos en unos cuantos años.
Besos primero a mis ex-suegras, todas menos la negrita del arroz, no vaya a decir que quiero ganármela de regreso y para nada, me perdió y tengo memoria de elefante (gris y áspera).
Besos también a Princesa, a su novio Memo, a Bola y sus posibles futuras novias y por supuesto a mi, por guardar en tan buen aprecio a las mamás de mis ex.
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